En toda relación conyugal, es esencial mantener el respeto mutuo. Tanto el hombre como la mujer deben aprender a convivir, cumplir con sus deberes conyugales y respetar los derechos del otro. Sin embargo, cuando se decide poner fin al matrimonio, es necesario tener en cuenta ciertos aspectos legales cuyo cumplimiento es obligatorio para ambas partes, independientemente de sus preferencias o deseos.
En el caso de los derechos de la mujer, según la Constitución Política de Colombia, tiene iguales derechos y oportunidades que el hombre, sin discriminación. En el contexto de los divorcios, es crucial que la mujer no sea perjudicada de ninguna manera.
Si una mujer desea iniciar los trámites de divorcio, es recomendable buscar asesoría legal de un abogado especializado en esta área. Juntos pueden trabajar en el proceso, que solo se aplica bajo una o varias de las siguientes causales (art. 154 C.C.):
- Relaciones sexuales extramatrimoniales del cónyuge.
- Grave e injustificado incumplimiento de los deberes conyugales y parentales.
- Ultrajes, trato cruel y maltratos de obra.
- Embriaguez habitual del cónyuge.
- Uso habitual de sustancias alucinógenas o estupefacientes, salvo prescripción médica.
- Enfermedad o anormalidad grave e incurable que ponga en peligro la salud mental o física de la mujer e imposibilite la comunidad matrimonial.
- Conducta que tienda a corromper o pervertir a la mujer, a un descendiente o a personas bajo su cuidado.
- Separación de cuerpos, judicial o de hecho, que haya perdurado por más de dos años.
- Consentimiento de ambos cónyuges manifestado ante un juez competente y reconocido mediante sentencia.
En cuanto a los derechos de la mujer después del divorcio en Colombia, una vez disuelto el matrimonio, los derechos y deberes respecto al cuidado de los hijos continúan. Es probable que la madre asuma la crianza y custodia, y el padre deberá cumplir con una pensión alimentaria establecida por el juez. Esta pensión puede extenderse a favor de la madre en casos aprobados por el juez, incluso en situaciones de suspensión de patria potestad.
La crianza de los hijos no recae únicamente en la madre. Aunque los hijos vivan con ella, el padre debe participar en su educación y formación moral e intelectual. El régimen de visitas del padre será determinado por el juez, no por la conveniencia de ninguna de las partes.
Otro aspecto relevante es la división de bienes en común tras la unión matrimonial. La mujer debe seguir las recomendaciones legales para recibir lo que por ley le corresponde.
En resumen, hay varios aspectos que la mujer debe conocer antes de solicitar el divorcio. Dada la posible carga de responsabilidades respecto a los hijos, se recomienda que un abogado especializado en derecho de familia la asesore antes de presentar la demanda. La mujer tiene la responsabilidad, junto con su abogado, de defender todos los derechos que la ley le otorga.
